Parece que todo viene de Japón: el Sushi, por supuesto. ¿Quién no lo ha probado?
 
Y además está el Ikigai, el Shinrin Yoku o el Kobido… son caminos maravillosos para explorar.

El país del Sol Naciente tiene mucho tirón, ¿no crees?

Ahora bien, ¿de verdad todas estas importaciones de otra cultura nos aportan algo bueno para nuestro día a día?

Te dejo a ti que me contestes, porque yo con Japón tengo una relación longeva y no soy ecuánime.

Mi primer contacto fue con el Judo, que practiqué de adolescente, y ahí paró la cosa hasta los 30, cuando lo retomé con nuevos conceptos:

Como la Macrobiótica (aún tengo y uso cuchillos y suribachi desde entonces, son eternos…).

O los incensarios japoneses… y prefiero las barritas de incienso japonés a las indias.

¿Y las teteras de hierro fundido y los vasitos para el té? Son simplemente maravillosos.

Y qué decir del Ikebana.

Adoro tanto su exquisitez, ligereza y sosiego que hace muchos años me compré libros para aprender y los materiales básicos para realizar estos adornos florales que aún conservo.

Con todos estos objetos y maneras de estar en el mundo conecto profundamente.

Pero, ¿todo esto ha aportado algo beneficioso a mi vida?  

Para mí sí: con el judo aprendí cómo la disciplina te ayuda a avanzar. Con la macro ciertos recursos nutricionales muy eficaces…

El incienso, el té y el ikebana me permiten conectar con el silencia, la calma, la presencia, la sencillez… que son parte de mi esencia.

Aunque sinceramente todo ello solo lo he tocado por encima sí que me ha ayudado a conocerme y sentirme mejor conmigo misma.

Y todo ello lo aplico en mi trabajo contigo, porque si no conecto con mi esencia poco puedo ayudarte a encontrar tu propia salud, tu esencia, tu equilibrio.

Pero uso la esencia, no pretendo usar nada de ello en mi trabajo contigo, porque quizás a ti no te guste ni te venga bien**.

Por ejemplo, en la masterclass CURA DEPURATIVA NATURISTA, que voy a dar el próximo martes en directo, no veremos nada de alimentación macrobiótica, ni te recomendaré tomar té Kukicha.
 
Es una sencilla cura depurativa naturista de nuestra cultura.

De hecho es un sistema en 3 pasos para que puedas llevar a cabo una eficaz depuración, por ejemplo esta primavera si quieres:

https://aguadeflores.com/producto/cura-depurativa-naturista/

Hasta mañana, que te contaré cositas que puedes eliminar con una buena depuración…

Besos y flores de Primavera.
Sheila.
 

P.S.: Y aún hay más!: también viene de Japón este hermoso poema haiku que te dedico para dar la bienvenida a la primavera:
 
 
“El helecho brota
 
sobre el arroyo
 
que corre por las rocas
 
! llegó la primavera!”
 
 
PRINCIPE SHIKI
 
 
 

 
**Salvo el Masaje Facial Japonés, que viene bien a todo el mundo… aunque es exclusivamente presencial, claro. Lo siento si no vives cerca…